23/8 "LOS ÚLTIMOS SERÁN LOS PRIMEROS"
Mt 19,30-20,16 EVANGELIO EN AUDIO
Sin duda alguna, lo más importante de esta parábola es que, en el Reino, las bendiciones y recompensas se reciben por la bondad y el amor de Dios y no según el mérito propio o el tiempo de servicio.
En el Reino no hay lugar para la envidia y la codicia. El resentimiento, por la bondad y generosidad de alguien, es una de las peores actitudes humanas, sin embargo es frecuente en nuestro entorno.
Dios siempre va en busca de todos, llama a todos, a cualquier hora, siempre quiere dar y acoge a los que encuentra.
Jesús, con esta parábola da golpe de gracia al concepto que no sólo los fariseos y escribas tenían sino también muchos de nosotros sobre Dios y su retribución. Jesús se ha hecho nuestro "pan de cada día", se ofrece en la misa a todos sin discriminación de edad, condición social o nivel de santidad.
Él se da, para que también nosotros aprendamos a darnos a los demás generosamente. ¿Ante Dios te sentís con más derechos que otros?