2º CUARESMA A - Escuchemos a JESÚS

03.03.2023

Seguimos caminando en cuaresma, buscando un hermoso tesoro, el tesoro de la Cruz de Jesús que es para nosotros recuerdo de su muerte pero también garantía de resurrección.
 El domingo pasado visitábamos el desierto donde descubríamos que la Palabra vence las tentaciones.
  Este domingo subimos al monte Tabor, el monte del encuentro con Jesús, donde escucharemos el grito del Padre: "Este es mi Hijo amado, escúchenlo". 
 
¿QUÉ NOS QUIERE DECIR JESÚS?

- En cuaresma le dedicamos tiempo a la Palabra de Dios: la leemos, la reflexionamos, la escuchamos, la oramos, dejamos que nos cambie por dentro, la transformamos en vida.
   Al leer los evangelios descubrimos cómo respondieron personas de fe, amigos de Dios, a lo largo de la historia, cómo se fiaron de Dios Moisés, Elías, Pedro, Santiago y Juan.

- La Palabra de Dios nos lleva al encuentro con Cristo, a experimentarle a nuestro lado y a sentir: "qué bien se está con vos, Señor" en la oración, en la eucaristía, siempre. Con él descubriremos cual es nuestra identidad, su proyecto de hijos de Dios.

- La Palabra de Dios nos lleva de nuevo a la vida cotidiana donde vivimos transfigurados, comprometidos con todos, llenos de la luz que nos ha trasmitido al encontrarnos con Él.

¿Te encontrás con Jesús en los Evangelios? ¿Cómo vivís tu fe?

       ORACIÓN en FAMILIA

Llenos de fe, oremos confiadamente al Señor. Digamos: 
–Que tu Palabra sea importante en mi vida.

1. Por la Iglesia, para que facilite encuentros con Dios en la oración personal y comunitaria. Oremos.

2. Para que escuchemos la Palabra de Dios y la valoremos más cada día. Oremos.

3. Para que en Cuaresma sigamos renovando nuestro bautismo y convirtiéndonos de nuestras malas actitudes. Oremos.

4. Para que la fuerza del Pan que vamos a compartir en la Eucaristía nos haga más hermanos. Oremos.

5. Para que salgamos de la Eucaristía dispuestos a bajar de las nubes y pisar el suelo de cada día. Oremos.

6. Para que todos los días busquemos momentos para orar, meditar la Palabra, y conectarnos al Dios que nos transforma por dentro. Oremos.

Escuchá, Señor, nuestras oraciones y regalanos tu amor y tu perdón.AMÉN.